Hola,
Menuda sorpresa se llevaron los agentes de la Policia Local de Pontevedra (España), que se encontraban realizando pruebas de alcoholemia la pasada madrugada por las calles de la ciudad... Y es que, cuando resulta dificil que la gente vaya al coche patrulla... este hombre no solo fue a el... sino que no queria marcharse...
El hombre, que presentaba evidentes síntomas de embriaguez (vamos, que estaba borracho como una cuba) se subió a un coche patrulla aparcado en la calle pensando que era un taxi. Los agentes necesitaron varios minutos para convencerlo de que abandonara el coche porque no queria hacerlo, e insistia en que lo llevasen a su casa.
Según los datos que han trascendido, los agentes estacionaron el vehículo policial en una zona reservada para taxis en aquella calle, mientras realizaban una prueba de alcoholemia en la zona. Y claro, al ocupar ese espacio reservado, el buen hombre debió pensar que efectivamente era un taxi e insistió en que fuera trasladado a su destino pese a que los agentes insistían en convercerle de que estaba confundido.
Por lo menos no iba conduciendo ningun coche, algo es algo! Aunque claro... el daltonismo del hombre es evidente... porque las luces patrulla no son precisamente verdes, que es el color del taxi libre... que le vamos a hacer!
Espero que te haya resultado curiosa la informacion... jeje
Fuente: farodevigo.es
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