Un pasajero de un vuelo entre Menorca y Glasgow consiguió que el avión no se retrasara al reparar una avería que sufría el aparato, según la cadena BBC. El avión sólo llegó con 35 minutos de retraso.
El personal del vuelo de Thomas Cook TCX9641 informó al pasaje el pasado sábado de que el vuelo iba a retrasarse unas ocho horas debido a un fallo mecánico y a la necesidad de que volara un ingeniero desde Reino Unido a la isla para repararlo.
En ese momento, uno de los pasajeros, cuya identidad no ha sido revelada, informó a la tripulación de que era un ingeniero cualificado y se ofreció a intentar arreglar él mismo la avería. Desde Thomas Cook aseguran que se siguieron todos los procedimientos para garantizar que el pasajero estaba cualificado para trabajar en el Boeing 757-200.
Según explicó la portavoz de la compañía, el pasajero trabajaba para otra aerolínea, Thomson Airways, que tiene acuerdos de mantenimiento recíprocos con Thomas Cook.
“Cuando anunciaron que había un problema técnico se presentó y dijo quién era, nosotros comprobamos su licencia y verificamos que era quien decía que era y que estaba capacitado para resolver el problema y evitar el retraso”, explicó. “Estamos muy agradecidos de que se encontrara en el vuelo ese día”, añadió.
Uno de los pasajeros a bordo del avión Keith Lomax explicó a la BBC que la tripulación les informó del fallo mecánico y de que un ingeniero que casualmente estaba a bordo iba a repararlo. “Cuando regresó al avión hubo aplausos en la parte trasera del aparato”, señaló, asegurando que “era tranquilizador saber que la persona que lo había arreglado estaba aún en el avión”.