Un manicomio lleno de locos decidió sacar unos cuantos del lugar porque estaba muy lleno, y para eso les hicieron una prueba a los locos, dibujaron una puerta en la pared, y el que se diera cuenta que la puerta no era de verdad lo iban a sacar, el primer loco pasó y trató de abrir la puerta y en eso otro loco no paraba de reírse, la sospechas del encargado fue que él ya no estaba loco, y otro loco trató de abrir la puerta, mientras tanto el otro loco todavía seguía riéndose, en eso le llama la atención el encargado al loco y le pregunta:
¿Y tú? ¿Por qué te ríes?
El loco contesta:
¡Es que aquí, traigo las llaves!
s locos planean la fuga del maniconio, uno le dice al otro:
Si la pared es baja la saltamos, si es alta cavamos un hoyo, ¿Entendido?
Sí, puedes ir primero.
Pasadas tres horas regresa el loco y dice:
No podemos escapar.
¿Por qué?
¡Porque no hay pared!
Si yo pongo un florero arriba de la mesa y mi esposa lo saca, ¿Quién de los dos está loco?
Los dos estamos locos, pues yo "locoloco" y mi esposa "loquita".
¿Para quién es esa carta?, le dice el director de un manicomio a un loco que está escribiendo.
Para mí mismo.
Y, ¿qué te pones?
¡Cómo quieres que lo sepa si aún no la he recibido!